Ir al contenido principal

Levántate, tú puedes

Salía presurosa por uno de los corredores. Resbalé y caí de manera irreprimible y estrepitosa. Fue horrible, un chico que pasaba por ahí me dió la mano y me dijo "levántante tú puedes". Casi me pareció ver a Jesús.

Unas chicas me preguntaron si estaba bien. Sí, estaba bien, con la dignidad alicaida pero bien. Algo me dijo que era algo premonitorio. Que mi caída era el principio de otras. Así fue. Llegué tarde a un sitio y la persona que tenía que ver me mandó muy lejos (figurado). Por la tarde decidí que mi destino no estaba predestinado por un hecho casual provocado por el frío. Me fue mejor.

Moraleja: no es por caer una vez que estoy destinada a caerme siempre. Es mejor seguir el consejo del amable chico: "Levántate, tú puedes".

Entradas populares de este blog

Deja tu comentario

Durante 5 minutos la posibilidad  de comentar queda abierta. Acribíllenme. Tiempo terminado. Ningún comentario. 

Lo que tu blog dice sobre tí

Cuando se habla acerca de blogs yo digo que tengo uno. No me da verguenza. He notado que la gente se muestra discreta, a lo mucho quieren saber si escribo sobre cocina o decoración. "Sobre crianza de niños" digo, como que la gente se tranquiliza. A nadie le importa eso. Si yo conociera al alguien que escribe un blog yo sí trataría de saber más sobre "ese" blog. Al fin y al cabo sabría sobre "esa"persona mucho más de lo que ella o él imaginaría. Mucho más.
Qué post más estúpido (el anterior). Hay gente que no debería tener acceso ni a computadoras ni a escribir blogs. Estoy hablando de mí.