Ir al contenido principal

No quiero ser madre (y me vas a odiar por esto pero no me importa)

Yo no puedo dar marcha atrás. A veces me gusta imaginar como sería mi vida sin hijos. Me molesta tanto tener que justificarme y decir cosas como "por supuesto que adoro a mis hijos". Y es cierto pero lo ideal sería no sentir que hay que decirlo. Es que la maternidad es un estatus endiosado y mitificado, tal vez el más manipulado de todos.

Sólo he conocido personalmente una mujer que no ha querido ser madre. Y se sintió obligada a justificarse cuando me lo dijo. Pero hace lo que le da gana y eso es envidable. Tiene TIEMPO. Eso es más envidable aún.

Los hijos traen, como toda madre sabe, muchas cosas. Las hay maravillosas y las hay terribles.

Me pregunto por qué nos escogieron a nosotras para eso. Tener reglas, cambios hormonales, todo eso es aborrecible. Qué levante la mano la primera a la que le guste tener reglas. Sentir que brota un líquido incontrolable, maloliente. "Gracias a ese proceso podrás tener hijos!". O sea no sólo el mecanismo (bastante incómodo y asqueroso) sino además el privilegio: tener hijos. La responsabilidad más grande de todas. El trabajo que no se acaba hasta la muerte.

Pero "una vida bien vale otra" me dijo una amiga que sólo se ha dedicado a su hijo y a su familia. Ella a sacrificado su vida por la de su hijo. Qué podía yo argumentar? era una decisión personal. Hasta que punto es personal, hasta que punto no es un lavado cerebral?

Cuantas cosas se irían a la mierda sin consumidores, trabajadores, individuos. Somos las fabricantes de estos componentes de la sociedad. El producto nos cuesta la vida, la sangre, la salud. La maternidad, sólo otro punto de vista.

Entradas populares de este blog

Deja tu comentario

Durante 5 minutos la posibilidad  de comentar queda abierta. Acribíllenme. Tiempo terminado. Ningún comentario. 
Qué post más estúpido (el anterior). Hay gente que no debería tener acceso ni a computadoras ni a escribir blogs. Estoy hablando de mí.

He sobrevivido para contarla

Qué abandonado has estado. No he podido escribir, ha sido tan increíble. Mi experiencia merece ser contada. Quiero que se sepa. Tengo que decirla. Por el momento estoy en la tierra, no en un planeta donde cosas extraordinarias pueden suceder. Bienvenida a la Normalidad. Mi historia aparecerá en otro lugar, pero aparecerá.