Existo porque escribo. Escribo porque existo. A veces me da verguenza tener un blog. Que pensaría yo de mí si me viera con los ojos de una extraña. Qué patética, qué vida tan aburrida. Cómo puede sentarse a escribir tanta tontera esta mujer.
Pero no, no soy patética, hay cosas extraordinarias en mi vida, en todas las vidas. Y también cosas aburridas y patéticas.
Pero no, no soy patética, hay cosas extraordinarias en mi vida, en todas las vidas. Y también cosas aburridas y patéticas.