Ir al contenido principal

Reivindicada

Estoy exhausta, a lo mejor me faltan vitaminas. Ayer hablaba por teléfono con una amiga francesa que se dedica a lo mismo que yo, a dar clases de español. Ella es reemplazante, me dijo que esa categoría tenía algunas ventajas. Seguro. Me preguntó si yo trabajaba, le dije que sí pero sólo 4 horas por semana, que empezaba la semana próxima. "No es nada" me dijo escandalizada. Es que mi amiga también está en eso de hacer la tesina y es casada pero no tiene hijos. Para mí, preparar clases para 4 horas de curso sí es algo y cuesta mucho cuando además se tienen que cuidar niños pequeños, hacer de chofer, cocinar, limpiar, encargarse de la ropa, etc. Felizmente en el último número de Le Monde diplomatique, un artículo titulado Profession domestique de Julien Brygo habla acerca de las condiciones de trabajo de las empleadas domésticas. Las mujeres de las que hablan no tienen ni la décima parte de mis privilegios, trabajan mucho y les pagan muy poco. A mí no me pagan puesto que esta es mi casa y los niños que cuido son los míos pero me molesta que me digan que 4 horas de clases no son nada.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Deja tu comentario

Durante 5 minutos la posibilidad  de comentar queda abierta. Acribíllenme. Tiempo terminado. Ningún comentario. 

Lo que tu blog dice sobre tí

Cuando se habla acerca de blogs yo digo que tengo uno. No me da verguenza. He notado que la gente se muestra discreta, a lo mucho quieren saber si escribo sobre cocina o decoración. "Sobre crianza de niños" digo, como que la gente se tranquiliza. A nadie le importa eso. Si yo conociera al alguien que escribe un blog yo sí trataría de saber más sobre "ese" blog. Al fin y al cabo sabría sobre "esa"persona mucho más de lo que ella o él imaginaría. Mucho más.
Qué post más estúpido (el anterior). Hay gente que no debería tener acceso ni a computadoras ni a escribir blogs. Estoy hablando de mí.